El antiguo edifico del mercado de la Plaza Chica era una ruina inmunda que día día se deshacía en pedazos convirtiéndose en una sombra. Los vecinos del barrio no están dispuestos a que se hundiese en el abandono. Una iniciativa novedosa alerto sobre el peligro de la situación en que se encuentraba. El Grito fue el título de una intervencion con 12 fotografías con las que se ha empapelo la fachada del antiguo mercado. Imágenes de gran tamaño que retrata rostros gritando, la de los propios vecinos del barrio y que ya formaron parte del edificio, hasta que se deterioraban por completo. Esta iniciativa sirvio para reivindicar el barrio como lugar donde hacer realidad proyectos creativos y la recuperación de espacios públicos en el Casco Antiguo.
manos a la obra se implico a los vecinos del barrio
La fotografía sorda, impacto visualmente y en lugar de silencio, grito con fuerza.
por Raulowsky y Oto
En la actualidad este edificio se rehabilita en vista de crear una biblioteca publica para el barrio.